Al tenerlo en sus brazos, María ve de cerca la agravación y profundidad de todas las llagas y heridas de su hijo, reavivando el dolor. Altísimo mío, meditando vuestros dolores y los de vuestra Santísima Raíz, te ofrezco estas oraciones para vuestra veterano empíreo, y pido me obtengas las gracias https://irvingi046okf6.blogofchange.com/profile